Tus huellas en generoso acopio
atesoro celosamente en mi baúl dormido.
cada dia leo tus voces ecoicas en mi
y tus signos de amor
tatuados en la inspiración de alma.
Pero es un dia, hoy, de plomo,
la cortina natural se yergue
sobre los techos
y en este dia yerto, húmedo y circunspecto
tal vez te quiero mas.
Te quiero en el vacio perenne de la soledad.
Te quiero en la palidez de las cenizas,
te quiero en la imagen sórdida de la calle abandonada.
Te quiero en la espesura
de mi habitación muda.
Y es que tus huellas, semillas sacras,
sembradas en la tierra
impregnada de herejía,
crean el verbo
la infinitud de tu presencia
y el perdón,
que en el universo volátil de mi alegría
te delinea para salvarme.
Bellísimo poema de amor, refleja a la perfección los sentimientos del enamorado, que ve al ser amado en todo cuanto encuentra. Me ha encantado y te sigo leyendo también. Mil gracias por tu lectura y precioso comentario y por agregarte a mí blog, yo también me agrego como seguidora del tuyo. Y perdona la demora en visitarte, pero es que estos días voy escasa de tiempo y entro poco. Por cierto, cuando abrí mi blog, lo hice con una plantilla idéntica a ésta de tu blog, después la cambié, porque como hago textos muy extensos, necesitaba una con menos márgenes, pero ésta es muy bonita. Un besote fuerte.
ResponderEliminarGracias Mayte, es un honor tu comentario y un placer descubrir tu blog, me gustan todas las fotos que subes, las de tus viajes, eso me apasiona. Comparto ademas tu interes por la historia de Roma. Creo saber desde hace tiempo que uno escribe para uno mismo, y si le gusta a alguien, pues mejor. Un besote, te sigo leyendo
ResponderEliminarLas formas poétcas, que no la sensibilidad que transmiten los buenos versos, siempre se me han atragantado. Apesar de ello, con detenimiento, tu poema transmite cosas.
ResponderEliminarah que wey soy... tienes razón ya sé como9 comentar... espera mis comentarios :)
ResponderEliminarsera un honor lupe, traete unos tequilazos no mas.
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